MIAMI.- El argentino Gerardo 'Tata' Martino aseguró este jueves, en su rueda de prensa de presentación como nuevo entrenador del Inter Miami, que habló con el argentino Lionel Messi y el español Sergio Busquets y que todos coinciden en el desafío de "venir a Miami a tener suceso", y destacó que en su mentalidad no existe "el lujo de no competir".
"Podemos estar en diferentes lugares, pero la forma de llevar adelante esta carrera será una sola. Ayer hablé con Sergio, y también cuando hablamos con Leo, hablamos de venir a tener suceso, a competir, a competir bien. Eso nos pasa incluso a nivel personal. A veces se asocia Miami con las vacaciones, nosotros queremos competir", afirmó Martino en la rueda de prensa organizada en el DVR PNK Stadium de Fort Lauderdale (EE.UU.).
"Ellos vienen de campeones del mundo, campeones en la liga española, no son futbolistas que van a venir acá a no competir, no se van a dar ese lujo porque lo llevan en la sangre", agregó.
Martino ya entrenó a Messi en el Barcelona en el curso 2013-2014 y en la selección argentina (2014-2016). También coincidió con Busquets en su etapa en el Barcelona.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email.> Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo 62 aquí.
El preparador argentino destacó que las negociaciones para dirigir al Inter Miami empezaron antes de que el club cerrara los fichajes de Messi y Busquets, incorporaciones que el técnico definió como "regalos".
"Yo empecé las charlas antes de Messi y Busquets y luego se fue dando lo de Leo y de Sergio, empezó después. A mí siempre me pareció atractiva esta oportunidad", dijo.
Con Messi en el centro, un cerebro como Busquets y la experiencia del 'Tata' Martino en el banquillo, el club pretende llevar su fútbol a otra galaxia y dejar atrás un comienzo de temporada para el olvido, que le ve colista en el Este de la MLS, con siete derrotas consecutivas, una tremenda fragilidad defensiva y una delantera que promedia menos de un gol por partido.
Deportes
"La gente siempre reclama resultados inmediatos. Las circunstancias son las que son. Hoy tenemos un problema, le dije a los jugadores que ahora somos parte del problema y esperemos que pronto seamos parte de la solución. Tenemos muchas expectativas. Probablemente necesitemos un tiempo", consideró Martino.
"En 2023 hay lindos desafíos. Uno es ver si podemos llegar a 'playoffs', hoy se ve como algo lejano, pero mientras tengamos posibilidades no podemos dejar de intentarlo. La copa US Open nos ve en posición privilegiada (semifinales) y también hay una nueva copa (la Leagues Cup entre clubes de la MLS y de la Liga MX) que nos da gran ilusión", prosiguió.
Martino insistió en que le encanta la MLS, por su variedad de condiciones meteorológicas, por su reglamento a la hora de fichajes (con límite salarial) y por su constante ambición de crecimiento.
"Que el mejor jugador del mundo (referido a Messi) decida venir a jugar a esta liga va a abrir un nuevo panorama", opinó.
Todavía habrá que esperar para que Martino, Messi y Busquets puedan estrenarse, pues el club está ultimando el proceso para conseguir sus visados de trabajo.
"Todo se entregó, estamos trabajando en el visado, esperemos en los próximos cinco o seis días podrá trabajar", dijo Chris Henderson, director deportivo del Inter Miami.
"Sobre Leo, estamos trabajando con la documentación, tomará un tiempo, pero confiamos en que a mediados o finales de julio pueda jugar, depende de la documentación", agregó.
Martino, de 60 años, ya tiene experiencia en la MLS, al haber dirigido al Atlanta United en sus primeros dos años en la liga y al haber conquistado la MLS Cup de 2018.
Con Messi y Busquets en el Barcelona, Martino ganó una Supercopa de España. El argentino perdió la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid en Mestalla, cuando el galés Gareth Bale firmó uno de los mejores goles de su etapa madridista, y acabó segundo en la Liga, conquistada por el Atlético Madrid.
Además, el técnico argentino dirigió a Messi de 2014 a 2016 en la selección Albiceleste. Llegó a dos finales consecutivas de la Copa América, ambas perdidas contra Chile. Su balance con Argentina terminó con veinte victorias, cinco derrotas y cuatro empates.