Filadelfia

Rampante violencia armada cobra vida de niña hispana

Un hombre quien trabajaba en la casa también resultó herido.

Un pistolero, quien hizo al menos siete detonaciones contra una vivienda en el sector de Kensington el domingo, alcanzó a todos los inquilinos en el interior incluyendo a una niña, de dos años.

Se informó que en este acto de violencia armada la menor, de origen puertorriqueño, fue impactada en varias ocasiones por los tiros. La madre de la menor y un contratista, quien laboraba en la casa en esos momentos, resultaron heridos.

El sospechoso, quien aún no ha sido identificado, abrió fuego contra la puerta y la ventana de una casa en la cuadra 3300 de North Water Street, a eso de las 3:31 p.m., dijo la Policía.

La niña, identificada como Nikolette Rivera, recibió un disparo en la parte posterior de la cabeza, mientras que la madre, de 24 años, fue baleada en el lado derecho de la cabeza y en la espalda. El contratista, de 33 años, recibió un disparo en el estómago.

La menor fue declarada muerta en el lugar a las 3:41 p.m. La madre y el hombre fueron llevados al Hospital de la Universidad de Temple. El individuo fue ingresado en estado crítico, mientras que la mujer está estable.

Hasta el momento no se han recuperado armas, diligenciado arrestos. La comisionada interina de la Policía de Filadelfia, Christine M. Coulter, dijo que el sospechoso probablemente huyó a pie y que la vivienda fue el blanco del ataque. "Fue la única casa afectada”, dijo. "Hubo seis o siete rondas que atravesaron la estructura. Sería demasiado para que fuera una coincidencia que no fuera allí donde estaban disparando".

Otro tiroteo ocurrió cinco minutos antes en 400 East Clearfield Street, que está a aproximadamente media milla de distancia. Nadie resultó herido durante ese tiroteo. Coulter dijo que encontraron evidencia de que se usó un rifle en el tiroteo en Water Street, mientras que tanto un rifle como una pistola pueden haberse usado en el tiroteo en Clearfield Street. La Policía aún no ha confirmado si los dos incidentes están relacionados.

La violencia del domingo ocurrió a menos de 24 horas de que un niño de 11 meses recibiera cuatro disparos mientras estaba dentro de un automóvil en el norte de Filadelfia. Ese niño permanece en estado crítico.

El alcalde de Filadelfia, Jim Kenney, emitió un comunicado el domingo diciendo que estaba "indignado, disgustado y desconsolado" por la violencia del fin de semana.

"Los habitantes de Filadelfia no deberían vivir con miedo a la violencia que podría quitarle la vida a un niño, pero para muchos esto es una triste realidad", escribió Kenney. "Con el flujo de armas y drogas ilegales sin cesar, debemos hacer todo lo que podamos para ayudar a resolver este problema. Nuestra administración tendrá equipos en los vecindarios afectados por la violencia para proporcionar los recursos disponibles, específicamente atención informada sobre el trauma, y ​​el Departamento de la Policía estará llevando a cabo una investigación completa y tendrá todos los recursos que necesiten para llevar a estos perpetradores ante la justicia".

Kenney también instó al público a presentarse e informar cualquier información. La línea de información anónima es 215-686-TIPS.

"Esto no es lo que somos", escribió Kenney. "Esto no es lo que define nuestra ciudad, y debemos trabajar juntos para crear una ciudad más segura para todos nosotros".

Si tiene información sobre cualquiera de los tiroteos, llame a la Policía de Filadelfia.

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