HOUSTON – Un total de 13 mujeres presuntamente afectadas por las acciones de un empleado de limpieza quien, aparentemente, osaba poner sus genitales en las botellas de agua de estas, presentaron una demanda civil contra las compañías en las que el hombre trabajó hasta ser descubierto.
El caso de Lucio Díaz se tomó los titulares de los medios de comunicación, luego de que se revelaran imágenes donde, aparentemente, se veía al hombre en su labor de tocar las botellas de agua con sus genitales.
Varias de las mujeres, incluida la que denunció inicialmente el hecho, sufrió el contagio de herpes, una enfermedad de transmisión sexual incurable.
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De acuerdo con la demanda presentada en una Corte Civil del Condado Harris, "las compañías -supuestamente- permitieron e hicieron caso omiso a la conducta reprochable del empleado de limpieza".
Inicialmente, la demanda fue presentada por cuatro mujeres, que trabajaron en el edificio East Houston, donde funcionaba el laboratorio médico en el que -presuntamente- se cometió el ilícito.
Una vez el hecho se hizo público, otras nueve mujeres se unieron a la demanda tras recibir los mismos diagnósticos médicos.
¿QUIÉN ES LUCIO DÍAZ?
Lucio Catarino Díaz es un ciudadano mexicano de 50 años, quien enfrenta varias acusaciones penales en el Condado Harris, Texas.
Luego de su detención, Díaz fue transferido el pasado 7 de octubre de la cárcel en el centro de Houston al centro de detención de la policía de inmigración (ICE, por sus siglas en inglés), ya que se encontraría en el país ilegalmente.
De acuerdo con ICE, Díaz permanecerá en custodia de las autoridades de inmigración mientras se lleva a cabo su proceso criminal en la corte 339 del Condado Harris.
Las autoridades de inmigración no tienen claro cuándo este cruzó la frontera sur de Estados Unidos desde México.
Según documentos radicados en la corte, Díaz puso su pene y orinó dentro de la botella de agua de una empleada hispana del centro médico.
Días después el resultado de análisis de laboratorio confirmó que la mujer dio positivo a herpes, una enfermedad incurable que puede llevar a la muerte en ciertos casos. Lucio también padecía de infecciones por clamidia, aunque esta enfermedad no le fue transmitida a la mujer.
Díaz fue grabado por la mujer, quien tenía sospechas sobre la conducta del hombre que trabajaba como conserje, y cuyo video sirvió para que las autoridades le imputaran los cargos en su contra.
Tras ser interrogado por las autoridades, Díaz habría confesado el hecho por el que se le acusa. Este trabajaba en un centro médico ubicado en el 1140 Westmount Drive, al este de la ciudad.