El jurado encontró culpable este martes a Hunter Biden en un caso federal relacionado con la compra de un arma que el hijo del presidente Joe Biden, adquirió en 2018 cuando estaba sumido en la adicción al crac, según la fiscalía.
Biden podría ser condenado a hasta 25 años de cárcel. Sin embargo, debido a su historial penal podría terminar en una pena muy inferior, una multa o rehabilitación.
El jurado deliberó desde la tarde del lunes y el martes en la mañana en un tribunal federal en Delaware. Su tarea es evaluar si Hunter Biden es culpable de tres delitos graves en el caso que lo enfrenta con el Departamento de Justicia en medio de la campaña de reelección de su padre.
Hunter Biden tomó las manos de su esposa cuando ella entró al tribunal, y la besó antes de sentarse en la mesa de la defensa. El juez convocó a los miembros del jurado en el tribunal antes de ordenarles que reanudaran sus deliberaciones.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo 62 aquí.
La semana pasada, la fiscalía presentó los testimonios de la exesposa y de varias exnovias de Hunter Biden, así como fotos donde aparece con parafernalia relacionada con las drogas y otras sórdidas pruebas, para demostrar que mintió cuando marcó la casilla del “no” en el formulario de la tienda de venta de armas donde se le preguntó si era “usuario ilícito de, o adicto a” las drogas.
“Él sabía que usaba drogas. Eso es lo que demuestran las pruebas. Y sabía que era adicto a las drogas. Eso es lo que demuestran las pruebas”, dijo al jurado el fiscal, Leo Wise, en sus alegatos finales, presentados el lunes.
La lucha de Hunter Biden con el abuso de sustancias tras la muerte, en 2015, de su hermano, Beau, está bien documentada. Pero la defensa ha argumentado que no se consideraba un “adicto” cuando adquirió el arma.
Después de que se anunció la decisión del jurado, el presidente Joe Biden dijo que aceptaría el resultado del caso y “seguirá respetando el proceso judicial mientras Hunter considera una apelación”.
“Jill y yo siempre estaremos ahí para Hunter y el resto de nuestra familia con nuestro amor y apoyo. Nada cambiará eso jamás”, dijo el presidente en un comunicado.
DE QUÉ SE LE ACUSA
Hunter Biden fue acusado de tres delitos graves derivados de la compra en octubre de 2018 de un arma que tuvo durante unos 11 días. Los fiscales dicen que mintió en un formulario de compra obligatoria de armas al decir que no consumía drogas ilegalmente ni era adicto a ellas.
Hunter Biden se declaró inocente y acusó al Departamento de Justicia de ceder a la presión política del expresidente Donald Trump y otros republicanos para presentar el caso y separar los cargos fiscales después de que un acuerdo con los fiscales fracasara el año pasado. Hunter Biden ha dicho que está sobrio desde 2019, pero sus abogados han dicho que no se consideraba un “adicto” cuando completó el formulario.
Las luchas de Hunter Biden contra la adicción a sustancias antes de volverse sobrio hace más de cinco años están bien documentadas. Pero los abogados defensores argumentan que no hay evidencia de que Hunter Biden realmente estuviera consumiendo drogas en los 11 días que estuvo en posesión del arma. Había completado un programa de rehabilitación semanas antes.
QUÉ DICE BIDEN SOBRE EL JUICIO CONTRA SU HIJO
El presidente Joe Biden dijo la semana pasada que aceptaría el veredicto del jurado y descartó un indulto para su hijo. La primera dama Jill Biden estuvo en la corte todos los días de la semana pasada para apoyar a Hunter, excepto el jueves, cuando estuvo con el presidente en Francia para los eventos del aniversario del Día D.
Parecía que Hunter Biden habría evitado por completo el procesamiento en el caso de armas, pero el verano pasado un acuerdo con los fiscales implosionó después de que la jueza de distrito estadounidense Maryellen Noreika, nominada para el cargo por el expresidente republicano Donald Trump, expresara su preocupación al respecto. Posteriormente, Hunter Biden fue acusado formalmente de tres delitos graves con armas de fuego. También se enfrenta a un juicio previsto para septiembre por delitos graves que alegan que no pagó al menos 1,4 millones de dólares en impuestos durante cuatro años.
Si es declarado culpable por el caso de armas, Hunter Biden enfrenta hasta 25 años de prisión, aunque los infractores primerizos no se acercan al máximo, y no está claro si el juez le daría tiempo tras las rejas.