Un adolescente, de 16 años, fue la víctima más reciente de la violencia armada temprano el miércoles.
El jovencito resultó herido cerca de Frankford Avenue y caminó hasta el Hospital Jefferson para obtener atención médica. Se espera que sobreviva, ya que, según las autoridades, fue ingresado en condición estable.
Este incidente se suma a los constantes tiroteos que no parecen tener fin alrededor de toda la ciudad. La noche anterior, el martes, un joven, de 17 años, murió en otro evento con armas de fuego.
Ante este panorama los vecinos de los lugares más afectados por la ola violenta aseguran que “es un terror realmente vivir aquí. Están matando a la juventud hoy en día”.
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El alcalde Jim Kenney dijo en una conferencia de prensa sobre violencia armada que están trabajando en subvenciones para organizaciones que puedan proveer servicios recreativos a los menores y mantenerlos fuera de las calles.
Sin embargo, líderes comunitarios aseguran que no es suficiente. “La ciudad lo que hace es como hablar, hablar, hablar y nunca hacen nada”, destacó Yari Báez. “Deberían de estar dejar de hablar tanta, hablando tanto y tanto y actuar. Actuar, pero ya. Tú entiendes, es ahora, es ya”.
Precisamente el miércoles el presidente Joe Biden dijo desde Casa Blanca que unirán esfuerzos con los estados más afectados por la violencia armada. Ante esto el alcalde Kenney se limitó a decir “lo que necesitamos es ayuda del gobierno (federal)”.
