Read the story in English here.
Después de tres décadas sin resolver, autoridades en Bucks County anunciaron un arresto que podría estar conectado con la muerte de una madre dentro de una casa en llamas.
Según el fiscal de distrito Matthew Weintraub, Robert Francis Atkins, de 56 años, fue arrestado y acusado de matar a Joy Hibbs hace tres décadas dentro de su casa en el vecindario de Croydon en 1991.
Todo comenzó como una agradable mañana en la primavera
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email.> Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo 62 aquí.
Según los investigadores, todo habría comenzado la mañana del 19 de abril de 1991, cuando uno de los hijos de Hibbs, David Hibbs, quien entonces tenía 12 años, se percató que su casa estaba en llamas.
Cuando los bomberos llegaron y lograron extinguir las llamas, encontraron los restos de Joy calcinados en la cama de David y con un cable atado en el cuello.
Al principio, parecía que Hibbs murió en un incendio accidental, pero los fiscales dijeron que la autopsia también develó que no había ningún residuo de humo en los pulmones de Hibbs, lo que indica que probablemente murió antes del incendio.
Local
Los investigadores también descubrieron que Hibbs había sido apuñalada, golpeada y estrangulada varias veces antes de morir, según muestran documentos judiciales.
La muerte habría ocurrido después de una compra fallida de marihuana ilegal
La policía dijo que creía que la persona que la mató habría iniciado el incendio para destruir cualquier evidencia.
Tras analizar más evidencia, la policía se enteró de que Hibbs y su esposo Charles compraban marihuana de Atkins de vez en cuando. Los fiscales añadieron que recientemente hubo una discusión sobre la calidad de la marihuana y que Atkins se negó a devolverles el dinero.
Los fiscales dijeron que también hallaron que Atkins conducía un Chevrolet Monte Carlo azúl, el mismo que fue hallado estacionado cerca de la casa de Hibs.
Pero durante las siguientes tres décadas, Atkins continuó siendo una persona de interés en el asesinato. Fue entrevistado por la policía al menos dos veces, pero siempre negó cualquier participación en su asesinato.
Pero todo cambió en abril, cuando April Atkins, la esposa de Atkins, aceptó testificar que el 19 de abril de 1991, ella vio a su esposo entrar a casa completamente cubierto de sangre.
"Él le dijo que había apuñalado a alguien e incendiado su casa", explicó la fiscalía. "Luego dijo que agarrara a los niños para un viaje a los Poconos.
"Joy Hibbs era una mujer sureña dulce y encantadora del centro de Florida. Una amorosa y devota madre, esposa y asistente médica", escribió la familia de Hibbs en un comunicado. "Durante 31 años, nuestra familia ha estado embrujada por esta trágica pérdida, sabiendo, sin lugar a dudas, que Robert Atkins fue el perpetrador".