La mujer de Abington Township en Montgomery County, Pensilvania, quien fue acusada por desmembrar y matar a sus padres en la vivienda familiar, no será condenada a la pena de muerte por la fiscalía, más sí, podría pasar el resto de sus días presa.
Se informó que Verity Beck, de 49 años y quien se encuentra en el centro correccional del condado, fue encausada por asesinato en primer grado por la muerte de sus progenitores, Reid y Miriam Beck, de 73 y 72 años, respectivamente.
El anuncio se produjo durante una audiencia de lectura de cargos contra Beck, quien se declaró inocente de dos cargos de asesinato en primer y tercer grado, abuso de cadáveres y posesión de instrumentos del crimen: un arma de fuego y una motosierra. Su juicio fue programado para febrero y permanecerá en prisión sin derecho a fianza.
No se ha revelado un motivo para los asesinatos. James P. Lyons, el defensor público de Beck sostuvo que “tenemos la intención de defender enérgicamente este caso”.
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Samantha Cauffman, fiscal asistente de Montgomery County, le dijo al juez que su oficina no buscaría la pena de muerte porque “los factores legales requeridos no están presentes en este caso”.
