Tempranito y sin aviso previo, brigadas de la Policía de Filadelfia llegaron en bicicletas al campus de la Universidad de Pensilvania el viernes para desalojar el campamento improvisado de estudiantes pro-palestina.
Conforme se organizaban los uniformados en distintas partes del plantel, algunos manifestantes huyeron del lugar y otros se encadenaron de brazos en la estatua de Benjamin Franklin ubicada en la plaza donde estaban apropiándose del espacio.
Con un megáfono las autoridades les dieron dos minutos para desalojar o comenzarían los arrestos. Tras el plazo de tiempo completado los oficiales comenzaron a remover uno por uno a los protestas que se negaban a abandonar “la propiedad privada”.
Algunos de los manifestantes estaban portando mantas conocidas como “keffiyeh” muy simbólica para los palestinos.
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Todo esto llega luego de que el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro aprobara el jueves la remoción del campamento en el sitio.
“Alrededor de las 5:30 a.m. del viernes la Policía de Penn con el apoyo de la Policía de Filadelfia tomaron pasos para desmantelar el campamento de manifestantes a lo largo de College Green. A los participantes se les dio varios avisos de que estaban en propiedad privada y se les dio la oportunidad de irse voluntariamente para evitar citaciones. Los que se quedaron fueron arrestados y removidos. Unas 33 personas enfrentan citaciones por invadir propiedad privada”. lee la comunicación oficial de la Universidad de Pensilvania.
La oficina del fiscal de distrito de Filadelfia dejó saber que ninguno de los 33 arrestados enfrentan cargos.
