Si confrontaste problemas de tránsito la tarde del miércoles en el área de Hunting Park en Filadelfia se debió a una impresionante vigilia en honor a un boricua perecido en un accidente.
Familiares, amigos y conocidos de Jason Arroyo, de 41 años, lo recordaron en grande con lo que más le gustaba al puertorriqueño: La fiebre.
Este término responde a carreras clandestinas a toda velocidad, así como otras permitidas entre grupos de competidores o amantes de los vehículos de motor.
Arroyo, mejor conocido como Jay, pereció el pasado siete de agosto cuando se impactó contra un camión al girar a la izquierda entre Hunting Park Avenue y 6th Street. Iba manejando una motocicleta, que, según familiares, había comprado ese mismo día para regalársela de sorpresa a su hijo.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo 62 aquí.
El perecido competía en carreras de autos en otros estados con su Mazda RX7 al que bautizó como “El humildón”.
Le sobreviven cuatro hijos, una esposa y decenas de familiares y amigos que extrañarán sus llamadas y su sentido del humor.
La Policía informó que el conductor de la camioneta contra la que se impactó el perecido se quedó en el lugar de los hechos, pero el hecho permanece bajo investigación.