Un fallo en una línea de transmisión de energía produjo el miércoles un inesperado apagón en todo el territorio ecuatoriano que dejó sin luz a unas 18 millones de personas, días después de que se anunciara que habría nuevos cortes en el suministro en todo el país por problemas de producción, según el gobierno.
El ministro de Energía de Ecuador, Roberto Luque, explicó en un mensaje en la red social X, antes Twitter, que dicho fallo fue reportado por el Operador Nacional de Electricidad y ocasionó “una desconexión en cascada, por lo que no hay servicio energético a escala nacional”.
Más tarde en una rueda de prensa, Luque aseveró sin entrar en detalles que el apagón se produjo por “falta de inversión en mantenimiento y nueva transmisión eléctrica”, así como por falta de un sistema de protección de la infraestructura. La falla ocurrió en una línea de transmisión ubicada en la provincia andina de Azuay.
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LA RAZÓN DEL APAGÓN, SEGÚN EL GOBIERNO
Según el ministro, a esa hora ciudades de la región andina como Quito, Ambato y Riobamba recuperaron el suministro energético en su totalidad. Sin embargo, en otras como Guayaquil apenas se recuperó un 41% del servicio y su restablecimiento total tardaría hasta cuatro horas.
Consultado sobre si el problema se podría repetir, Luque afirmó que “es poco probable”, pero que el episodio era el reflejo de la “crisis” que atraviesa el sector energético.
Por la noche, Luque informó en la red social X que, “a escala nacional el 95% de la energía ya estaba restablecida”, lo que representa una generación de 3,500 megavatios, precisó.
Medios de comunicación y usuarios de redes sociales reportaron que el problema generó inconvenientes, incluso en zonas hospitalarias.
QUÉ PASA EN EL SECTOR ENERGÉTICO
Ecuador enfrenta desde el año pasado una crisis de generación eléctrica que derivó en racionamientos en todo el país y que en abril llegó a provocar cortes de luz programados por el gobierno del presidente Daniel Noboa de entre 8 y 12 horas diarias en horario lectivo y fueron disminuyendo paulatinamente.
Debido al fuerte temporal invernal, las centrales hidroeléctricas Coca Codo y San Francisco paralizaron sus actividades debido a que los embalses que los abastecen traían gran cantidad de desperdicios.
Emilia Cevallos, una joven mesera que atiende en un restaurante de una zona comercial del norte de la capital, comentó a The Associated Press que el apagón fue sorpresivo. “Creímos que era solo en este sector, pero al salir nos dimos cuenta que algunos locales conectaron generadores, pero la mayoría no tenía luz, los semáforos tampoco funcionaban”.
El municipio capitalino informó en X que se movilizaron agentes para coordinar el flujo de tránsito, en tanto que la empresa que opera el Metro de Quito reportó que el servicio quedó suspendido debido a la falla; se recuperó luego de tres horas. Además de las filas que debieron realizar los usuarios a la espera del reinicio de operaciones, algunas personas quedaron atrapadas en ascensores, activándose los protocolos de atención inmediata, añadió.
En Cuenca, a 300 kilómetros al sur de la capital, la situación se repetía con anuncios desde la alcaldía sobre la gestión del tránsito y la suspensión de operaciones de un tranvía, que también reanudó su servicios con el restablecimiento del suministro eléctrico.